Los fertilizantes aportan a las plantas uno o varios de los elementos nutritivos indispensables para su desarrollo vegetativo
El sol, el agua y la tierra no siempre son suficientes para que una planta crezca y se desarrolle. Para completar su alimentaci?n, necesita de ciertas sustancias qu?micas simples del suelo, los llamados nutrientes vegetales. Ya sean de origen org?nico o qu?mico, los fertilizantes nutren y mantienen el equilibrio qu?mico en la plantas.
Parte de los aportes de nutrientes de flores, plantas y ?rboles proviene de los abonos org?nicos, como compost y esti?rcol, pero su principal fuente de alimento son los fertilizantes qu?micos. Adem?s de reponer los nutrientes eliminados por el agua de lluvias y riego, podas, barrido de hojas, etc., aceleran y mejoran algunas funciones de las plantas, tales como la fotos?ntesis, la floraci?n, el tama?o de las frutas, etc. Tambi?n prolongan su vida y las protegen de plagas y enfermedades.
Fertilizantes org?nicos. Proceden de residuos animales o vegetales. La mayor?a son de acci?n lenta, ya que proporcionan nitr?geno a medida que las bacterias los descomponen y su efectividad y rapidez de acci?n dependen del tipo de terreno.
Esti?rcol de vaca, oveja, etc.
Residuos animales como huesos triturados, cuernos, etc.
Compost. Se obtiene a partir de restos vegetales y otras materias org?nicas sometidas a un proceso de compostaje.
Turba. Se usa como base para preparar sustratos para macetas y semilleros.
Extractos h?micos. Desbloquean minerales, activan la flora microbiana, favorecen el desarrollo radicular, etc.
Fertilizantes qu?micos. Por lo general son de acci?n r?pida y estimulan el crecimiento y vigor de las plantas. Se agrupan seg?n la sustancia que proporcionan.
Nitr?geno. Est? relacionado con el crecimiento de ramas y hojas, ayuda a mantener su color verde y, al formar parte de la clorofila, favorece la germinaci?n. Cuando falta nitr?geno, las hojas se amarillean y dejan de crecer.
F?sforo. Favorece la formaci?n de flores y frutos, y fomenta su perfume. Les aporta la fuerza necesaria para mantenerse r?gidas y poder sostener todas sus partes. Tambi?n estimula el desarrollo de las ra?ces. Si falta f?sforo, las hojas se oscurecen m?s de lo normal y la planta deja de florecer.
Potasio. Es el responsable de la multiplicaci?n celular y de la formaci?n de tejidos m?s resistentes a la sequ?a, las heladas, las plagas y enfermedades. Si no hay potasio, las hojas muestran severos cambios de color en tonalidades amarillentas o verde muy p?lido, con manchas de color caf?.
Calcio. Participa en la divisi?n y crecimiento de las c?lulas. Es b?sico para la absorci?n de los otros elementos.
Hierro. Favorece la formaci?n de la clorofila y de compuestos que intervienen en la fotos?ntesis.
Magnesio. Est? relacionado con el color verde de las hojas al formar parte de la clorofila.
Molibdeno. Facilita la fijaci?n del nitr?geno atmosf?rico y su posterior transformaci?n en nitratos.
Fertilizantes org?nico-minerales. Se obtienen de la mezcla o combinaci?n de abonos minerales -nitr?geno, potasio, magnesio, etc.- y org?nicos.
Las propiedades qu?micas de los fertilizantes son claves para su comportamiento en el suelo, su manipulaci?n y conservaci?n.
Solubilidad. Es determinante sobre el contenido o riqueza de cada elemento nutritivo en un fertilizante concreto.
Reacci?n del fertilizante sobre el pH del suelo. Se establece por el ?ndice de acidez o basicidad del fertilizante, que se corresponde con la cantidad de cal viva que es necesaria para equilibrar el incremento de acidez del suelo -fertilizantes de reacci?n ?cida- o favorecer un aumento de pH equivalente -fertilizantes de reacci?n b?sica-.
Higroscopicidad. Es la capacidad de absorber agua de la atm?sfera a partir de un determinado grado de humedad de la misma. Cuanto mayor es la solubilidad del fertilizante en agua, mayor es su higroscopicidad.
El estado f?sico en que se presenta un abono juega un importante papel en las condiciones de utilizaci?n y la eficacia del mismo, ya que de la presentaci?n dependen la homogeneidad de su distribuci?n y su integraci?n en la tierra.
Fertilizantes s?lidos. Se presentan en polvo, granulado, pastillas, clavos, gel, bastoncillos, etc. Todos ellos se colocan o mezclan con la tierra y liberan sus nutrientes de forma gradual.
Fertilizantes l?quidos. Son los m?s utilizados por su f?cil uso. Se aplican directamente sobre las plantas o disueltos en agua, con regadera o dosificador de manguera, y su efecto es inmediato. Son la mejor opci?n para las plantas cultivadas en macetas o jardineras.
Fertilizantes foliares. Son un buen complemento a la alimentaci?n del sustrato. Se pulverizan sobre las hojas y sus nutrientes penetran hasta la savia. Aunque proporcionan exhuberancia a las plantas, su uso est? desaconsejado si existe riesgo de lluvias, o mucho sol y calor, ya que las hojas se pueden quemar.
Fertilizantes gaseosos. Dentro de este grupo s?lo se emplea el amon?aco anhidro. Este gas est? a temperatura y presi?n normal, pero para facilitar su almacenaje y transporte se pasa a estado l?quido y se comprime. Para inyectarlo en el suelo, se vuelve a transformar en gas.
Una adecuada elecci?n del tipo de fertilizante depende de la fertilidad del suelo y su nivel de salinidad, del tama?o y el tipo de la planta, de la cantidad de agua disponible y de las condiciones climatol?gicas.
Los tres n?meros indicados en los envases de los fertilizantes indican el porcentaje de nutrientes (en peso) contenido en el paquete. El orden en que aparecen es una convenci?n universal: el primero corresponde al nitr?geno, el siguiente al f?sforo y el ?ltimo al potasio. Si se toma como ejemplo un envase rotulado "10-10-10", que es el fertilizante que se ajusta a m?s tipos de plantas, ?ste contiene un 10% de nitr?geno, un 10% de f?sforo y un 10% de potasio. El 70% restante es material de relleno inerte, como piedra caliza granular, que ayuda a repartir el fertilizante de manera m?s uniforme sobre el suelo.
La primavera es el mejor momento para abonar plantas y flores. Otra ocasi?n id?nea para usar fertilizante es la siembra.
Para un resultado ?ptimo hay que seguir las instrucciones de la etiqueta, tanto las referidas a cantidades como las relativas al modo de uso.
Cuando se planta una nueva flor, hay que aplicar el fertilizante en el hoyo antes de colocar la planta.