Sirve para algo m?s que calentar o descongelar alimentos
El estilo de vida de miles de personas ha cambiado radicalmente desde
que se introdujo en nuestras cocinas el horno microondas, hasta el
extremo de que a muchos se nos antoja ya impensable no disponer de este
aparato en casa. Las bondades del microondas se basan, fundamentalmente,
en su rapidez para calentar alimentos y en la comodidad y sencillez de
su uso, lo que ha permitido a este electrodom?stico adaptarse
perfectamente al actual modo de vida, poco dado a alardes culinarios y
m?s orientado a recalentar y descongelar alimentos ya preparados.
Pero el horno microondas ofrece muchas m?s posibilidades que el calentamiento de los alimentos, y se puede utilizar incluso para elaborar sofritos y salsas.
El horno microondas funciona de forma totalmente distinta al resto de hornos convencionales. Posee una fuente emisora de ondas electromagn?ticas, las microondas, que provocan una fricci?n entre las mol?culas de agua del interior del alimento, lo que produce calor que se transmite al resto de mol?culas por contacto. As? se calienta el alimento. Las microondas penetran 1 ? 2 cent?metros de profundidad y posteriormente el calor se difunde. La velocidad de calentamiento es cuatro veces superior a la de los hornos convencionales.
Para que los alimentos se calienten, las microondas deben atravesar el propio alimento y los recipientes que los contienen. Son adecuadas las vasijas de vidrio, porcelana, loza, cer?mica y las de pl?stico que indican expl?citamente su compatibilidad con las microondas. Se ha demostrado que algunos pl?sticos, al calentarse, pueden desprender parte de sus componentes y pueden resultar t?xicos, por lo que se deben utilizar s?lo recipientes que hayan sido fabricados especialmente para ser usados en los hornos microondas (llevan una etiqueta o s?mbolo que lo indica). Sirven como materiales auxiliares, el papel absorbente, el film transparente, las bolsas de cocci?n para horno, el papel de estraza y los moldes de papel. Nunca se deben utilizar metales, incluido el papel de aluminio o cuberter?a, ya que reflejan las microondas contra las paredes del horno y ?ste puede averiarse. Ocurre lo mismo con las vajillas de cer?mica con dibujos o adornos con alg?n elemento met?lico. El papel o el cart?n pueden quemarse.
Rapidez en la preparaci?n de las recetas
Los alimentos deshidratados o con poco contenido en agua se calientan
antes que los m?s l?quidos, y pueden calentarse excesivamente o quemarse
si son cocinados a potencias muy altas. El microondas permite que los
alimentos se descongelen en pocos minutos a la vez que las radiaciones
destruyen los g?rmenes. Calienta directamente el alimento en su propio
recipiente o lo cocina a una velocidad incre?ble. Con el fin de que la
comida no se enfr?e tan r?pido, observaci?n com?n entre muchos usuarios,
los t?cnicos aseguran que se debe revolver la comida una o dos veces
durante la cocci?n o el recalentado, y dejarla reposar unos 20 segundos
una vez que se haya apagado el horno para que la temperatura se
equilibre. El horno microondas hace posible la preparaci?n de
incontables platos, de forma perfecta y en tiempos muy breves. Es el
caso de sofritos, jugos, salsas, primeros platos, sopas...
Comodidad
Se puede cocinar en el mismo recipiente que se usar? despu?s para
comer. Adem?s, limpiar el microondas s?lo requiere pasar a las paredes
un pa?o h?medo con bicarbonato y lim?n.
Sabores m?s naturales
Al cocerse los alimentos en su propio jugo conservan las sales minerales y se aprecia mejor el sabor real del alimento.
En lo que se refiere al valor nutritivo de los alimentos, hasta la fecha no se ha comprobado que las microondas provoquen mayores p?rdidas nutritivas que otros m?todos de cocci?n tradicional. Incluso en el caso de los productos congelados, al ser la cocci?n m?s r?pida, se reduce la p?rdida vitam?nica. Adem?s, los alimentos se cuecen en su propio jugo, de modo que se reduce la p?rdida de nutrientes que se produce cuando se cocinan en medios l?quidos.
Los microondas, bien usados, son absolutamente seguros
No obstante, debe manejarse con cuidado a la hora de cocinar distintos alimentos. El tiempo de cocci?n en el microondas se calcula con relaci?n al volumen de comida. Si se supera el tiempo, los alimentos pierden vitaminas y se desnaturalizan algunos de sus componentes como las prote?nas. Se ha comprobado en muchos estudios que los alimentos cocinados con microondas tienen un aroma m?s d?bil y menos agradable. Y los alimentos no quedan ni tostados ni crujientes a menos que el aparato incorpore un tostador convencional.
El riesgo principal de los microondas no deviene de la naturaleza de las ondas electromagn?ticas, sino de su superior eficacia y potencia para calentar los alimentos, lo que puede provocar sobre calentamientos en los platos y quemaduras diversas. Para disipar todo resquemor, la Organizaci?n Mundial de la Salud (O.M.S.), asegur? ya en 1992 que no existe ninguna prueba cient?fica de que la salud de los consumidores de alimentos preparados en los hornos microondas corra alg?n riesgo, siempre que se sigan las instrucciones del fabricante.